¿Cada vez que cambias la ropa de casa tus armarios y cajones están patas arriba y al final nunca encuentras lo que buscas? ¿O, una vez las has apilado, parecen ocupar el doble de espacio del necesario? Eso significa que necesitas algunos trucos para asegurarte de que mantienes la casa ordenada en todo momento.
A menudo, por comodidad y pereza, guardamos los textiles del hogar apilándolos en armarios o cajones sin seguir ninguna técnica específica. Pero es precisamente esto lo que nos hace correr el riesgo de crear el caos. Así que si quieres tener una casa limpia y ordenada, los consejos que te vamos a dar sobre cómo guardar la ropa de casa te facilitarán el día a día.
1. Haz una selección

En primer lugar, agrupa tus toallas, albornoces, sábanas, manteles, edredones y mantas por categorías… Luego decide qué quieres conservar y qué ya no quieres, siguiendo la filosofía de Marie Kondo de «si ya no te hace feliz, entonces es hora de deshacerte de ello». De esta forma, no acumularás cosas inútiles y que ocupen espacio innecesariamente.
Obviamente, si aún están en buen estado, puedes regalarlos o donarlos a quienes más lo necesitan, mientras que, si están inservibles, puedes reciclarlos como trapos para limpiar la casa.
Una vez seleccionados y ordenados, deben doblarse lo mejor posible para que estén siempre bien cuidados, ordenados y al alcance de la mano.
2. ¿Cómo doblar correctamente?

Para reducir las molestias y el tiempo dedicado a rebuscar en los cajones y ordenar después, es buena idea doblar la ropa de casa y guardarla en sus propios estantes. Además, no ocupará más espacio del necesario y no la encontrarás arrugada cuando la necesites. Cada tipo de lino tiene su propia técnica de plegado, y es más difícil decirlo que hacerlo, pero una vez aprendido, será un juego de niños.
Algunos métodos infalibles siguen siendo los empleados por la escritora japonesa de economía doméstica Marie Kondo. El núcleo del enfoque Konmari es doblar y guardar todo en el armario para que esté bien visible y organizado.
Juego de toallas

Una vez dobladas correctamente, las toallas grandes y pequeñas deben guardarse junto con sus homólogas de tela y color, quizás atadas para evitar que se dispersen. Esto también es muy práctico si vas a recibir a amigos o familiares, ya que les permite disponer de un espacio en el baño y de un juego de toallas particular. Pero, ¿cómo doblarlas?
La toalla grande ocupa sin duda más espacio, pero en sólo tres pasos puedes ahorrar mucho espacio y mantenerla planchada y ordenada:
- Primero, dóblala en 3 partes por el lado corto
- Ahora dóblala en 3 partes, pero por el lado largo
- Dobla el conjunto por la mitad
Para la toalla pequeña y menos voluminosa:
- Sigue el mismo procedimiento, saltándose el último paso, es decir, sin doblar por la mitad
Por último, vuelve a unirlos superponiendo el más pequeño con el más grande, de modo que ambos sean claramente visibles.
Otra forma muy práctica es también apilarlos doblados en un rollo, sobre todo si quieres colocarlos a la vista o si quieres utilizar una de las mejores técnicas para ahorrar espacio. Sacarlos de la pila será mucho más rápido. Y quizás clasificarlos por color, tamaño…
Juegos de cama

Pasemos a la ropa de cama.
Sobre todo, si se trata de sábanas dobles, puedes conseguir que alguien te ayude para ahorrar tiempo y esfuerzo (si es posible).
Sólo hay que seguir unos sencillos pasos para colocar las sábanas bajeras:
- Ayúdate colocándolos en una superficie lo suficientemente grande, la cama es ideal
- Doble la sábana por la mitad en sentido longitudinal, dejando los bordados, diseños o encajes visibles en el exterior
- Doblar de nuevo 2 veces, siempre por el lado largo
Las sábanas con esquinas son mucho más fáciles de manejar por sí solas y sin necesidad de ayudarte con algunas superficies para doblarlas correctamente, incluso si son dobles.
- Agarra las esquinas de un lado con ambas manos
- Coloca la sábana boca abajo y junta las dos esquinas con las dos correspondientes del lado opuesto
- Haz lo mismo con las dos esquinas restantes, formando así un cuadrado o rectángulo
- Extiéndala sobre una superficie plana y elimine las arrugas
- Continúe doblándolo varias veces por un lado
- Terminar doblando por la mitad dos veces por el otro lado
Te aseguramos que puede parecer complicado, pero es mucho más rápido y fácil al ponerlo en práctica.
Terminamos el juego de cama con la funda de almohada, que puede disponerse de forma muy similar a las toallas de mano:
- Doblar en 3 partes siguiendo el lado corto
- Ahora en 3 partes más siguiendo el lado largo
- Doblar por la mitad
- Y colócala dentro de la hoja correspondiente, para que siempre encuentres la que corresponde
Manteles y textiles de cocina

Cuando se trata de manteles y paños de cocina, la técnica es casi similar a la utilizada para las toallas:
- Comienza doblando por la mitad el lado corto
- Repite este paso dos veces más
- Todavía en el lado corto, doblar un lado hacia el centro
- A continuación, dobla el otro lado del mismo lado varias veces para superponerlo y hacer un cuadrado
O simplemente puedes enrollarlo, tal vez atarlo con una bonita cinta, y dejarlo a la vista como adorno.
Si el mantel es redondo, se requiere una técnica ligeramente diferente:
- Dobla el mantel por la mitad, formando un semicírculo
- Dobla la parte no redondeada opuesta al pliegue hacia dentro
- Ahora dobla los otros lados no redondeados sobre sí mismos
- De este modo, formarás un rectángulo y podrás guardarlo junto a tus otros manteles y paños de cocina
3. Almacenaje eficaz gracias a unos productos inteligentes

El almacenamiento y la colocación cuidadosa de los textiles domésticos es muy importante para garantizar que se mantengan limpios, ordenados y siempre listos para su uso. Pero es igual de importante disponer de los elementos adecuados para optimizar el tiempo y el espacio. ¿Alguna idea sobre productos que te conviertan en un maestro de la organización?
Para el almacenamiento en armarios y cajones, hay una serie de productos de almacenamiento que te ayudarán a organizar tu espacio. Por ejemplo, prácticas cajas de cartón, estuches de almacenamiento, estantes verticales colgantes y las imprescindibles cajas de vacío con tecnología de succión, que son especialmente adecuadas para la ropa voluminosa y ahorran hasta un 75% de espacio a la vez que proporcionan una protección eficaz hasta la próxima vez que las utilices. O incluso organizadores especialmente diseñados para cajones, bolsas de vacío manuales o bolsas de vacío con succión.
Y, por supuesto, no olvides cuidar tu ropa con la ayuda de bolitas de cedro antipolillas y bolsitas perfumadas.
Si buscas soluciones visibles que aporten un toque de elegancia a tus habitaciones, puedes pensar en cestas para la ropa sucia, cestas de tela o de estética natural o cajas decorativas.
Si tienes poco espacio, las soluciones montadas en la pared son la mejor opción. Opta por ganchos, perchas, ganchos para puertas, estantes y repisas de pared, pero con el método que prefieras, eligiendo entre autoadhesivo, pegamento o ventosa, para evitar agujeros en la pared, u otras soluciones perforando.