No hay nada más deprimente que un cuarto de baño desordenado cuando te preparas por la mañana. Para empezar bien el día y ganar el máximo tiempo posible, lo ideal es un espacio zen y ordenado, donde todo esté en su sitio.
Es cierto que no siempre es fácil cuando se dispone de poco espacio, pero a veces basta con un poco de organización… Aquí tienes una pequeña lista de ideas y consejos que te ayudarán a redescubrir el placer de mimarte en un entorno agradable y relajante.
Instala perchas y ganchos

Para liberar el máximo espacio posible, elige bonitos ganchos para los albornoces y la ropa. Algunos pueden atornillarse a la pared, mientras que otros pueden colgarse simplemente encima de la puerta sin necesidad de taladro. Sea cual sea tu preferencia, los colgadores te ayudarán a evitar dejar la ropa tirada por el cuarto de baño de forma antiestética.
También puedes poner ganchos cerca del lavabo y de la puerta de la ducha, para que no tengas que contorsionar el cuerpo para coger las toallas.
Organiza tus cajones

¿Tienes los cajones desordenados? En lugar de perder el tiempo buscando lo que necesitas, utiliza organizadores de cajones. Disponibles en forma de compartimentos modulares o compartimentados, te permitirán clasificar tus artículos de aseo y cuidado de una vez por todas.
Añade espacio de almacenamiento en la ducha

Para que tus momentos en la ducha sean realmente cómodos, la solución ideal es instalar estantes de almacenamiento en la pared para tener a mano todos tus productos. ¿No quieres hacer agujeros en la pared? Tenemos un plato de ducha telescópico que se fija manualmente a la esquina de la ducha mediante un sistema de muelles. Regulable en altura de 1,65 a 2,75 m, se adapta al espacio disponible y cuenta con 4 estantes modulares de almacenamiento.
Fija estantes murales sin taladrar

Cerca del lavabo, la bañera o la ducha, ¿por qué no instalar estanterías murales? Una vez más, no hace falta que hagas ningún agujero: nuestras estanterías de baño pueden fijarse con ventosas o con un sistema de parches autoadhesivos muy fácil de instalar. ¡Y te aseguramos que se mantienen! Al utilizar las paredes para guardar tus artículos de aseo, despejarás al instante el desorden de la parte superior del lavabo, el borde de la bañera o el plato de ducha. No hay necesidad de hacer acrobacias: ¡todo lo que necesitas está al alcance de la mano!
Opta por un dispensador de jabón
No, los dispensadores de jabón no son sólo para lugares públicos. Al contrario, facilitan el lavado de manos de toda la familia e incluso pueden ahorrarte dinero en el día a día, ya que para llenarlos sólo tienes que comprar una recarga ecológica de gran formato. En la ducha o cerca de la bañera, también pueden utilizarse para el champú y el acondicionador. Se acabaron las botellas y el jabón mustios.
Guarda el maquillaje y las joyas

Rebuscar en un cajón o en el fondo de un neceser para encontrar la barra de labios o el colgante adecuado es francamente molesto, ¿verdad? Los organizadores de maquillaje solucionan este problema. Están compartimentados, a veces con cajones, para que las joyas y los productos de belleza estén perfectamente accesibles.
Elige un bonito cesto para la ropa sucia y cestas de almacenaje

Como último paso en el cambio de imagen de tu cuarto de baño, invierte en un cesto para la ropa sucia donde cada miembro de la familia pueda colocar la suya. Y no tengas miedo de dejar a la vista algunas cestas de almacenaje para mantener en orden las toallas, por ejemplo. Sus fibras naturales son maravillosas para añadir un toque decorativo y hacer de tu cuarto de baño un lugar de bienestar para grandes y pequeños.
Por último, si tienes la suerte de disponer de una ventana en el cuarto de baño, nada te impide añadir una o dos plantas verdes para disfrutar de un aire de naturaleza en este espacio de limpieza y cuidados.
En resumen, tanto si tienes prisa como si sólo quieres recargar pilas, un cuarto de baño ordenado te garantiza momentos de paz y desconexión.