Llega septiembre y junto con él la vuelta al cole. Toca guardar el pareo y los juguetes de la playa y sacar la mochila, los cuadernos y los libros. Y, por supuesto, poner a punto los escritorios de los pequeños —o no tanto― estudiantes de la casa, cosa que parecerá imposible con el desorden producido por casi tres meses sin sentarse en él. Por suerte, contamos con variedad de accesorios de almacenaje que podemos utilizar a modo de organizador de escritorio para que tengan todo a mano y a la vez ordenado.
Lo más conveniente es comenzar por separar lo necesario para estudiar de lo que no lo es. Es decir, fuera juguetes, bolsos, ropa y entretenimientos del escritorio; no solo dificultarán el poner orden, sino que también les despistarán a la hora de hacer las tareas escolares.

Una vez que hemos retirado todo lo que debe ir en otros lugares, pasamos al segundo paso: organizar el material escolar en el espacio del que dispongamos, que normalmente suele ser una mesa con por lo menos un cajón, alguna cajonera integrada o independiente y una balda (o más). Para llevar a cabo esta tarea, no podemos elegir mejor organizador de mesa de estudios que los separadores de cajones. ¿Que por qué? Porque hay infinidad de tamaños, materiales y distribuciones y encontraremos el que mejor se adapte a nuestras necesidades, seguro. Es más, no solo nos sirven para los cajones, sino que también los podemos colocar sobre la mesa y en las baldas. Entre todos los modelos: lisos, estampados, de mimbre, de madera… alguno quedará perfecto con la decoración del resto de la habitación. De esta manera, cuando nuestros niños o adolescentes se sienten a trabajar tendrán a la vista y bien ordenado todo lo que necesitan y no perderán tiempo en buscarlo.
Truco especial 1: si eliges el organizador de escritorio de madera, ya pueden ser cajas, botes separadores… cada uno podrá personalizarlo a su gusto, bien sea con pinturas, rotuladores, acuarelas o incluso pegatinas. Podrán pintarlo entero o solo dibujos, escribir su nombre, etc. Les quedará bien bonito y seguro que les cuesta menos sentarse a hacer los deberes si todo lo que tienen a mano es de su gusto.
Truco especial 2: ¿quieres una buena idea, original y funcional, para usar de organizador de lápices y bolígrafos? Ahí va: un organizador de maquillaje. En lugar de lápices de ojos, brochas y pintalabios, colocaremos los útiles de escritura. Si tiene muchos compartimentos, también se pueden separar las pinturas o rotuladores por tonos, o colocar pinceles. Según el gusto y el uso de cada cual.

Como hemos visto, lograremos un escritorio bien ordenado seleccionando adecuadamente los accesorios de almacenaje en función de lo que vamos a guardar. Los estudiantes tienen cantidad de objetos, normalmente desperdigados, mas si optamos por un organizador de cajones personalizado cada cosa estará a mano y la localizarán con facilidad. Además, podrán personalizarlo a su gusto, con lo cual, todos contentos: los niños y adolescentes porque les gusta su mesa, y los padres porque tienen un escritorio funcional que les ayudará a la hora de estudiar.